TÍTULO: NUNCA SEREMOS IMPOSIBLES
AUTOR: ISABEL SIMAL
EDITORIAL: TERCIOPELO
FECHA DE PUBLICACIÓN: 29.10.2020
Nº PÁGINAS: 158
Nadia no pasa por su mejor momento. A sus casi treinta y dos años vive con sus padres, lleva tiempo sin escribir, la acaban de echar del trabajo sin motivo y es la única de sus amigas que sigue soltera; aunque esto último es lo que menos le preocupa de todo. Solo está pendiente de cruzarse cada día con Álex, un yogurín doce años menor que ella. Un refresco y un futbolín son los causantes de su encuentro y un banco del parque será su refugio para huir de los malos. Se esconden en una burbuja de felicidad donde las dudas se cubren con besos, sexo, canciones y risas. Pero… ¿será el amor suficiente para olvidar la diferencia de edad?
Isabel Simal López nació el 17 de septiembre de 1985 en Toledo. Es Licenciada en Periodismo y Graduada en Turismo por la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid. Ha colaborado como redactora en el departamento de radio de la Agencia Efe y dentro del sector hotelero, en las diversas secciones que lo componen como recepción, administración y reservas. Se define como un intento de muchas cosas y mientras trata de averiguar cuál es su aportación al mundo, está ocupada viajando, leyendo y escribiendo. Recientemente, ha publicado su primera novela Me quedo contigo.
Empiezo mi reseña diciendo que todo lo que voy a comentar es opinión propia, como todas las que he hecho hasta ahora y que haré en un futuro.
Antes que nada, quiero dar las gracias a la editorial Terciopelo por ofrecerme leer y reseñar esta novela con la que he disfrutado muchísimo. Hacía tiempo que no me divertía tanto leyendo, y con Nadia y Álex me lo he pasado pipa.
Antes que nada, quiero dar las gracias a la editorial Terciopelo por ofrecerme leer y reseñar esta novela con la que he disfrutado muchísimo. Hacía tiempo que no me divertía tanto leyendo, y con Nadia y Álex me lo he pasado pipa.
En Nunca seremos imposibles, Isabel Simal nos trae una novela refrescante, de esas que te bebes en una tarde de piscina o en la tranquilidad de la playa, solo que yo la he disfrutado, tanto o más, bajo la manta y lloviendo a mares.
En esta novela se nos presenta a Nadia, una chica de 32 años que se empieza a ver atraída por un chico de 20, y viceversa. Lo que empieza como un tonteo entre dos personas se convierte, poco a poco, en algo más. Pero, ¿puede una diferencia de 20 años salvarse por amor? ¿a qué precio?.
Los personajes me han parecido geniales. Muy bien caracterizados y muy diferentes entre sí.
Tanto Nadia con su forma de ser alocada, pero madura; y Álex, que no olvidemos que está en la edad de la rebeldía y la locura, pero con una mentalidad fija y asentada para su edad.
Para mi gusto hacen la combinación exacta y se complementan, y eso es lo que hace que esta pareja me guste en demasía.
Además, quizás para algunos, el tema principal (el amor entre dos jóvenes con una diferencia de edad de 12 años), pueda parecer que se trata con demasiada exageración, pero creo que ese es el cometido de la autora, que viéramos que el amor entre dos personas con "tanta" diferencia (aunque yo no veo "tanta") puede parecer el fin del mundo por el qué dirán, pero es algo natural y que puede ocurrir, y ocurre más de lo que imaginamos.
La forma de narrar la historia me ha encantado. Los capítulos están contados por Nadia, pero cada capítulo finaliza con una reflexión o la forma de ver la situación contada por las palabras de Álex, lo que hace que nos emocionemos por saber cómo ha vivido Álex esos momentos y qué va sintiendo.
Quizás, a veces, fuera como darnos la piruleta para después quitárnosla, nos daban ganas de saber más sobre lo que opinaba Álex, pero creo que era la forma justa de tenernos enganchados entre capítulos e informados sin necesidad de que Álex tuviera que recontarnos la historia. A mi en especial me ha gustado bastante esta forma de narración.
Cada capítulo, además, nos deja con sensaciones diferentes. Hay capítulos en los que vamos a soltar alguna lagrimilla, en los que vamos a reír a carcajadas, que son la mayoría, y capítulos en los que vamos a recordar ese primer amor, esa infancia en la que todo lo vemos color de rosa y que el amor se vive de una manera tan inocente. Pero sobre todo nos va a llenar de sentimientos porque son tan dulces y tan alocados que la mezcla es, simplemente, perfecta.
La extensión es idónea, porque no es ni largo ni corto. Tiene lo que tiene que tener y con eso es más que suficiente. Además que no nos quedamos con la sensación de que necesitemos más.
Y la pluma de la autora, que no la conocía ni había leído nada de ella antes, me ha sorprendido gratamente. Me ha parecido fresca, ágil y muy amena, haciéndonos ver y conocer cada cosa sin necesidad de muchas descripciones, que a veces pueden parecernos copiosas. Aquí las descripciones son las justas y necesarias y dejan al lector poner su granito de imaginación para completar la escena.
Creo que la lectura de Nunca seremos imposibles es una apuesta segura si quieres pasar un rato divertido y con mucho amor.
Creo que la lectura de Nunca seremos imposibles es una apuesta segura si quieres pasar un rato divertido y con mucho amor.
¡Cómo la he disfrutado! 😍
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Mil gracias por leerme. Hasta aquí la reseña de hoy.
Nos leemos en la próxima! 😘
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